Tras 58 años en las oficinas de Correos, la obra de Isidro Parra pasa a manos de todos los alcazareños

La Gerente de Servicios y Productos de Correos Anabel López y Rosa Melchor, Alcaldesa de Alcázar de San Juan, han firmado un documento por el que Correos cede al obra del pintor alcazareño Isidro Parra al Ayuntamiento para su restauración y custodia hasta que sea reubicada en un nuevo emplazamiento y siga siendo disfrutada por todos, como lo ha hecho hasta ahora embelleciendo las oficinas de correos

Sociedad 26 Febrero de 2024

La Oficina de Correos y el Ayuntamiento de Alcázar de San Juan han firmado esta mañana la donación del característico mural de Isidro Parra que decora su fondo, una obra que lleva más de 50 años acompañando a la institución desde que fuera la Caja Postal de Ahorros y que ahora pasará a custodiar la casa consistorial. La alcaldesa de Alcázar de San Juan, Rosa Melchor, acompañada de la concejala de Cultura, Cristina Perea, ha asistido al acto para firmar la donación junto a Anabel López Rivas, gerente de Productos y Servicios de Correos, así como al resto de representantes de la empresa pública.

Este mural de Isidro Parra, que tiene unas dimensiones de 8×2 metros, es una de las tantas obras que el alcazareño realizó durante su carrera tanto dentro como fuera de nuestra localidad. En este caso, la Oficina de Correos de Alcázar de San Juan ha decidido cederle la obra al Ayuntamiento en un gesto de gran consideración por la dificultad de mantener y conservar de manera adecuada una pieza de estas características: «Ha sido para nosotros un honor que este autor haya tenido a bien hacer un homenaje a nuestro trabajo, y hoy estamos encantados de que pase a ser patrimonio del pueblo de Alcázar», ha explicado Anabel López.

Rosa Melchor ha agradecido encarecidamente a Correos por su responsabilidad respecto a garantizar la longevidad de la obra de Isidro Parra, permitiendo que «en el futuro los alcazareños y alcazareñas sigan disfrutando de ella». La alcaldesa ha explicado que el Ayuntamiento custodiará la obra hasta que el restaurador pueda acceder a ella y que los técnicos del consistorio puedan escoger una ubicación ideal, con una gran afluencia de público, para un cuadro de estas dimensiones.