SOPA DE AJO

Ingredientes:

6-8 dientes de ajo

Aceite de Oliva Virgen Extra

Pimentón de la Vera

Pan duro

Agua o caldo

 

Preparación:

Sofreir en una cazuela los ajos con aceite de oliva virgen extra, añadir el pan cortado en trozos pequeños y freirlo.

Una vez fritos el pan y los ajos, retirar la cazuela del fuego y añadir el pimentón de la Vera, sal y remover bien.

Añadir el agua o el caldo y dejar cocer a fuego lento unos 10 minutos.

Servir bien caliente en un cuenco.

Es un tipo de sopa típicamente castellana y leonesa que contiene fundamentalmente agua o caldo, pan de días anteriores, pimentón, ajo y aceite de oliva. Es un plato de origen humilde, y como tal, está sujeto a diferentes variantes según la economía de la familia o los gustos del cocinero, por lo que es normal que se le añadan otros ingredientes.

En la antigüedad era muy frecuente tomarlo como almuerzo. Al alba se desayunaba un café bebido y unas horas después, se tomaban sopas de ajo con un huevo dentro cocinado al calor del caldo.

Tradicionalmente la sopa de ajo tiene muy pocos ingredientes:

Agua caliente, de la que algunos cocineros dicen que el truco es que no rompa a hervir. Tradicionalmente se le añade algún hueso de vaca o jamón para enriquecerla.

Pan duro. Suele emplearse de hogaza, de varios días y puede decirse que es el ingrediente principal.

Ajo. Es el tercer ingrediente de la sopa y el que le da el nombre, empleándose una cantidad variable y siendo lo habitual, una buena cantidad.

Pimentón. Éste tiene una función doble, colorear de rojo el pan y dar aroma.