Sacrificio y tradición en la Semana Santa de Campo de Criptana

El origen de la subasta de las imágenes data del siglo XIX, cuando los alcaldes mayores tenían la potestad de traer hasta la población a la Virgen de Criptana y al Cristo de Villajos, patrones de Campo de Criptana. Una potestad que cedían al pueblo mediante subasta. Una tradición que no tardó en trasladarse a la Semana Santa subastando así quien tendría el privilegio de portar en andas las imágenes de cada cofradía.

En torno a 1850 ya hay datos de la Cofradía de la Veracruz de subastas y es curioso como con el paso de los años esos escritos reflejan en maravedíes, reales y después pesetas la cantidad de la subasta.

Antes las subastas se realizaban en cada ermita, subastando las imágenes correspondientes a cada cofradía, pero después se decidió concentrar a todas en la Plaza Mayor. Es una tradición muy propia de Campo de Criptana que consiste en que las cuadrillas de anderos se reúnen el Domingo de Ramos en la plaza y pujan por aquella imagen que quieren sacar.” José Muñoz, Presidente Junta General de Cofradías

Organizada por la Junta General de Cofradías, después de la misa de la mañana del Domingo de Ramos, se subastan tres imágenes de dos cofradías en particular. Por la tarde, se subastan el resto de pasos de las demás cofradías.

Pues unos meses antes se junta a la gente que quiera sacar una determinada imagen, acuerdan la cantidad económica hasta la que pueden llegar y en el Domingo de Ramos se comienza a subastar hasta que una de las cuadrillas se queda la imagen.” José Muñoz, Presidente Junta General de Cofradías

Actualmente hay tres vías para portar en andas las imágenes en Campo de Criptana, hay Cofradías que nunca han subastado, otras que sólo subastan algunas de sus imágenes y otras que directamente adjudican este privilegio a cuadrillas con meses de antelación.

El objetivo que tienen tanto las subastas como las adjudicaciones es mantener y conservar el patrimonio: cubrir gastos para mantener la decoración de las ermitas, las imágenes, las salidas a calle de las procesiones con bandas de música, ornamento florar, seguros de responsabilidad civil, seguros de accidente, etcétera. Es decir, todo esto conlleva una serie de gastos que gracias a las subastas y adjudicaciones ese dinero sirve para reinvertirlo en las procesiones, en el mantenimiento y funcionamiento de las cofradías y en el mantenimiento del patrimonio.» José Muñoz, Presidente Junta General de Cofradías

Una vez que se adjudica una imagen, se firma un pequeño documento que refleja el compromiso para sacar ese paso en el día concreto con la cantidad subastada.

Momento en el que se tiene que armar la cuadrilla de anderos que tienen que medirse para que la altura de los mismos sea lo más uniforme posible, eso ayuda a que nadie vaya excesivamente cargado o con menos peso del que le corresponde.

Con un mayor número de pasos y de mayor volumen, el número de anderos requeridos cada vez es mayor, de ahí la necesidad de jóvenes que vayan iniciándose en el mundo cofrade.

Para que las imágenes puedan salir a la calle hace falta cantera, que los chavales de 10 o 12 años las imágenes más pequeñas las empiecen a portar, es una forma de que esas personas cuando tengan 20 años puedan portar prácticamente cualquier imagen.» José Muñoz, Presidente Junta General de Cofradías

1568 es la fecha desde la que se tiene constancia en el Archivo Histórico de la representación de una Semana Santa en Campo de Criptana, con un arraigo entre sus gentes y entre los que tienen en sus calendarios marcadas estas fechas para visitar la villa manchega y disfrutar de su Semana de Pasión.