El Autocares Rodríguez Daimiel, campeón de la Copa Diputación por tercera vez consecutiva
Venció al Cabezuelo CB Socuéllamos en su cancha por 67-82. El partido se decidió en el último cuarto con un parcial de 11-23. El MVP de la final fue para Rubén Bruno. Más de 100 aficionados daimieleños arroparon al equipo
El partido comenzó con un parcial de salida de 6-0 de los socuellaminos que les fue devuelto de inmediato con otro 0-9 de los daimieleños, dejando claro que el duelo no iba a resultar nada sencillo para ambos equipos. El intercambio de canastas llevaba al 19-19 con el que terminaba el primer cuarto.
En el segundo, los triples de Hervás y el buen hacer de Vilches ponían una pequeña ventaja para los daimieleños, pero por el otro lado los fichajes de los socuellaminos se encargaban de que esta nunca fuera muy amplia. Un par de triples forzados de los locales y el acierto desde el tiro libre conseguía abrir una pequeña brecha a su favor, que los daimieleños consiguieron rebajar hasta el 38-33 con el que se llegaba al descanso.
Tras la reanudación el Autocares Rodríguez Daimiel salió muy metido en partido y gracias a una excelente defensa poco a poco fue poniendo el partido de su lado. El equipo buscaba una y otra vez a Eugenio Illescas en el interior, sacando siempre cosas positivas y llegando a anotar 11 puntos de forma consecutiva que le daban las primeras ventajas amplias al Autocares Rodríguez Daimiel. El veterano base Diego Fox mantenía al Cabezuelo Socuéllamos en liza a base de tiros libres y acierto desde el 6,75, pero no era capaz de cortar la dinámica del partido, favorable a los daimieleños.
El último cuarto comenzaba con un 56-59 que se convertiría en los primeros dos minutos en un 56-67. Gran trabajo atrás de todos los daimieleños que no permitían ni un tiro cómodo de los locales y que en ataque rompieron el partido gracias a la irrupción de Rubén Bruno con sus triples. Los daimieleños continuaron su excelente labor defensiva de equipo llegando al +16 a falta de 3:30 para el final. A partir de aquí los jugadores se relajaron en exceso y permitieron a los socuellaminos meterse de nuevo en el partido, recortando 9 puntos en tan sólo 2 minutos debido a numerosos balones perdidos que permitían bandejas fáciles a los locales. El equipo se recompuso en defensa y volvió de nuevo a su juego para ampliar la renta y poner el definitivo 67-82 en el marcador.
Rubén Bruno se llevó el merecido MVP de una final en la que el Autocares Rodríguez Daimiel jugó y se comportó como un gran equipo, realizando un juego intenso, solidario y con una gran lectura de que hacer en cada momento del partido.
El Autocares Rodríguez Daimiel estuvo arropado por más de 100 seguidores que se desplazaron en el bus del equipo y con sus coches particulares.
