Santiago Lázaro «Criptana saldrá adelante con el ejemplo de nuestro pasado y nuestro incansable esfuerzo compartido»

No es nada fácil escribir unas palabras en unas circunstancias tan dificiles y dolorosas como las que estamos viviendo en estas últimas semanas. Los fallecidos y sus familias son el centro de las preocupaciones de todo un pueblo que está observando como la pandemia del COVID-19 está haciendo tambalear los pilares de un estado del bienestar que ya teníamos asumido como irrenunciable y fuera de toda cuestión.

Una compleja situación, que además tiene un aspecto más simbólico al desarrollarse en unas semanas de gran importancia para nuestra cultura y nuestra historia.

Ya hemos dado ﬁn a una atipica Semana Santa, y la culminamos en Campo de Criptana en este tiempo anómalo con nuestro tradicional día de la Virgen de Criptana. Una fecha, el lunes de Pascua que supone para todos nosotros algo más que un día festivo en el calendario, como es la entrada simbólica en la primavera y la llegada de una época de esplendor en nuestros campos de cebadas y trigales antes de que nuestras viñas empiecen a teñir de verde el horizonte manchego.

La festividad de la Virgen de Criptana supone la llegada de la patrona a su pueblo, y se convierte en un día de encuentro de familiares y amigos en el cerro, de hornazos en los soportales, un día de devoción hacia nuestra patrona. En deﬁnitiva, en un día de los que justiﬁcan y dan sentido a un pueblo con historia e impronta como es Campo de Criptana.

Y es que la historia de nuestra villa molinera debe entenderse desde un origen medieval en torno a los núcleos de Villajos, Posadas Viejas, El Campo y Chitrana. La historia nos demuestra cómo precisamente en esa época medieval las cuarentenas eran formas comunes de enfrentarse a todo tipo de epidemias de peste, cólera y lepra. De ahí la gran vocación a Santos protectores ante estas epidemias como San Sebastián, San Roque, San Cristóbal o San Antón, cuyo testigo y muestra nos han quedado con nuestras ermitas.

Hoy nos toca revivir una nueva y dura página de nuestra historia, pero no me cabe duda de que, igual que hace siglos, los criptanenses vamos a sacar lo mejor de nosotros mismos, para conseguir salir de esta situación con tanta fuerza y tesón como los criptanenses hemos demostrado a lo largo de decenas de generaciones.

La responsabilidad, la prudencia y el comedimiento nos van a privar de nuestro día de la Virgen como los criptanenses sabemos disfrutarlo, pero estoy seguro, que más pronto que tarde, nuestra patrona va a estar entre nosotros, y entonces podremos demostrarnos a nosotros mismos que nuestra identidad y orgullo como pueblo van a estar salvaguardados para la historia.

Comentaba el escritor Victor Hugo que «no hay nada como un sueño para crear el futuro». Hoy los criptanenses miramos al futuro con el optimismo propio de un pueblo que cree en sí mismo y en sus posibilidades.

Santiago Lázaro López, alcalde de Campo de Criptana