Cañas, la bodega donde los clientes son familia

Situado en la calle San Sebastián, frente a la Ermita del Santo, La Bodega de Cañas es un acogedor y familiar espacio que nació hace siete años con alma de vinoteca hasta evolucionar con el paso del tiempo en un pequeño bar de tapas que en ocasiones, ha llegado a congregar a más de 150 personas.

Gracias a su fiel clientela, llegar a Cañas es como volver a la casa familiar. Un ambiente auténtico, fresco y arrollador que te envuelve con una sensación cálida y cercana en la que además, se puede degustar una amplia variedad de tapas caseras que abarca un recorrido entre los sabores más manchegos y castellanos de la cocina española.

Con una larga trayectoria en el mundo del vino y un gran conocimiento de los caldos de la región, esta pequeña bodega reconvertida en bar invita a volver una y otra vez gracias a la dedicación y la pasión de su personal.

Con la llegada del calor estival, la terraza de Cañas se transforma en un hervidero de personas que disfruta de tintos de verano, jarras de cerveza y vinos especialmente seleccionados.

Entre las numerosas festividades que se celebran en Alcázar de San Juan, una de ellas destaca por la gran cantidad de gente que atrae que no duda en agolparse en la calle rodeado de sus amigos y familia.

La Bodega de Cañas también dispone de una finca privada en la que a lo largo del año ofrece servicio de restaurante a grupos de empresa, realiza fiestas y eventos privados, amoldándose a las exigencias y peticiones del cliente, a los que deleita con una generosa carta.

El éxito de este acogedor bar de tapas reside en el excepcional ambiente familiar y único que se ha logrado a lo largo de los años, y que sin duda, tanto José María como Eva, los gerentes de la Bodega de Cañas, seguirán conservando para el gusto y el deleite de sus clientes y los que aún están por llegar.