Viernes de Pasión, en la procesión de La Virgen de los Dolores en Campo de Criptana

Fuente: Libro Editado por la Junta General de Cofradías de Campo de Criptana

El viernes de Doloros se presenta con el anhelo de todo un pueblo de comenzar a vivir nuestra semana grande.

Las diez de la noche y una Cruz Guía aparece por la portada del Templo Parroquial, dos filas interminables de azul y rojo desfilan con disimulada disciplina, llenando de incienso y respeto las calles de Campo de Criptana.

Nuestra Señora de los Dolores llena de melancolía los corazones de los criptanenses. Por mucho que las marchas de palio sean más alegres y que tus anderos con devoción te lleven y hasta un nazareno hacendoso con el pábilo mantenga encendidas tus velas, en nuestro corazón algo triste dejas a tu paso, tu dolor al ver a tu Hijo entregado. Qué alegre y a la vez melancólico callejear, mi Señora de los Dolores, tantos hermanos te acompañan que deberían bastarte para secar tus lágrimas, pero solo tú como madre sabes que el fruto de tu vientre sufrirá tanto, que un puñal atravesará tu corazón para siempre. Haz que mi alma se consuele a tu paso y que mi corazón dolorido se sienta confortado.

Tu lento procesionar es oración, no puede haber un comienzo más profundo que nos prepare para la Pasión, María la Madre del Cordero Entregado con su dolor.