La Asociación Swing Ciudad Real lleva el baile a las residencias de mayores de la provincia

 

La música swing suena y se baila en las calles de muchas ciudades de Castilla La Mancha desde hace algunos años, gracias a las escuelas de Lindy Hop que imparten clases a alumnos de todas las edades. Pero la Asociación Swing Ciudad Real ha querido ir mucho más allá y compartir la experiencia del baile y la música con los usuarios de las residencias de mayores la provincia.

De momento han asistido a centros residenciales de la capital y han visitado el centro Ntra. Sra. de la Asunción de Miguelturra, pero quieren continuar con la iniciativa altruistra en otros municipios. Desde la asociación confiesan que es “una experiencia muy bonita, que a las personas mayores les encanta porque muchos de ellos escuchaban esta música cuando eran jóvenes”.

El swing surgía en Estados Unidos allá por los años 20 de la mano del jazz y vivió su máximo esplendor con las grandes orquestas de Count Basie o Duke Ellington, cuando se convirtió en uno de los géneros musicales más populares. Con la irrupción del rock and roll y del pop, tras la Segunda Guerra Mundial, el swing fue cayendo en el olvido. Su música permaneció en los conciertos de jazz, reducidos a un público culto y minoritario. Se escuchaba en un sepulcral silencio, y además moverse al ritmo de la melodía incluso estaba mal visto.

El baile del swing fue recuperado en los años 80 por los suecos. En la actualidad, existen multitud de eventos sociales, festivales y escuelas en todo el mundo que imparten clases. También en nuestra región, donde cada vez tiene más adeptos. Además, se trata de una actividad intergeneracional que no tiene límite de edad, porque la practican desde jóvenes hasta mayores de 65 años. Los que han probado confiesan que es una terapia muy positiva y una forma sana de relacionarse y mantenerse activo.

Fotos: Alicia Benavente