El II Campus de Porteros de Alcázar de San Juan, se afianza en la comarca

La segunda edición del Campus de Porteros de Alcázar de San Juan ha contado con 14 chavales con edades comprendidas entre los 5 y los 15 años que durante una semana han podido aprender y reforzar las habilidades que se requieren de un portero.

Los porteros necesitan un entrenamiento específico para ellos al igual que el resto de jugadores, los delanteros necesitan hacer finalizaciones y los bandas centros, los porteros necesitan hacer portería. Técnicas que sin un trabajo constante, dificultan el trabajo de los chavales de cara a las competiciones que tienen durante todo el año.

Nuestra intención es seguir trabajando para que este campus siga realizándose cada año y para ello nos esforzaremos en conseguir atraer a más gente y trabajar todos los aspectos que los porteros necesitan, José Antonio Castellanos

Participantes como Alejo Olmedo, que viene de Pedro Muñoz para trabajar y mejorar los pequeños detalles que le faltan por trabajar, durante estos días Alejo resalta que lo que más le ha llamado la atención ha sido la visita de los psicólogos deportivos. Durante una tarde les enseñaron a gestionar sus sentimientos y a canalizar sus habilidades y capacidad de gestión de cada uno de los momentos que se suceden dentro del campo de juego.

Javier Benítez, monitor del campus, explicaba que los objetivos se adaptan un poco a sus necesidades, aprendiendo conceptos y metodología específica de porteros, que cuanto antes la aprendan mejor trabajaran bajo palos. De igual manera Benítez destacaba que durante estos días la progresión se hace evidente, y sobre todo la relación entre ellos ya que durante una semana conviven chavales de edades muy diferentes, pero en contra de establecer una barrera, se forma una gran familia en la que los pequeños aprenden y de los mayores, y éstos cuidan de ellos.

Para Diego González, que es su primer Campus, nos contaba que ha sido una semana estupenda en la que ha aprendido mucho y sobre todo a conocido nuevos amigos, hecho que todos destacan y motivo por el cual quieren repetir en nuevas ediciones.

Diego Chocano, uno de los mayores nos explicaba, que siempre ha querido participar en una batalla de porteros de las que se organizan a nivel estatal, pero que está muy contento de poder hacerla aquí en su casa. Como bien explicaba Chocano, la batalla consiste en enfrentar dos porterías y sus porteros a conseguir el mayor número posible de goles en un tiempo determinado. Además esta edición Diego ha sido el ganador de la misma, tras ir pasando cada una de las fases que le llevaron a la final ante Alejo Olmedo.

Sergio Simón, que repetía esta edición, ha aprendido a pasar el balón con la mano, a no tirarse de rodillas en los penaltis y como todos, a destacado lo a gusto que se ha sentido entre sus compañeros y monitores.

Un campus que ha cumplido sus objetivos y las expectativas, no sólo de los chavales, sino también sus familias que se han sentido muy agradecidas ante un equipo de profesionales que durante una semana han cuidado y formado a sus hijos. Un deseo de todos es poder seguir contando en casa con este campus que tanto ayuda a esos olvidados porteros que bajo palos a veces no son valorados como se debe.