Comienzan las XXXVII Fiestas de Moros y Cristianos de Alcázar de San Juan

Este año se cumplen 36 años de la Fiesta de Moros y Cristianos en Alcázar de San Juan, creada en 1.988 por los vecinos del barrio de Sta. María y declarada Fiesta de Interés Turístico Regional en 2016

Sociedad 24 de junio de 2024

Muchas han sido las etapas por las que la fiesta ha ido pasando y multitud las actividades que se han ido programando año tras año permitiendo que perdure casi cuatro décadas.

36 años de celebración, hermanamiento y convivencia gracias a la participación de numerosos colectivos de dentro y fuera de nuestra localidad.

Este año el honor de pregonar las fiestas ha recaído en Jesús Miguel Montalvo Olivares, festero de la fila de San Juan y componente del extinto Grupo de Recreación Histórica de la Asociación de Moros y Cristianos Al-Kasar, quien ha recordado como en las visitas que hacía a su familia en Valencia le sirvieron para enamorarse de la pólvora, la música y el color de las celebraciones levantinas, germen que terminó por aflorar cuando vio a los vecinos del barrio de Santa María, celebrar sus fiestas ataviados con vestimentas de moros y cristianos, algo que le cautivó de tal manera que desde sus orígenes ha estado vinculado a unas modestas fiestas de barrio que el pueblo de Alcázar de San Juan hizo suyas y que año tras año siguen conquistando la ciudad de Al-Kasar.

La tradicional izada de banderas ha adquirido en esta edición un cariz especial, siendo el primero en el que esta misión ha correspondido a un colectivo involucrado en la Fiesta de Moros y Cristianos. Una iniciativa que surge del interés de dar una mayor relevancia a este acto simbólico y que busca marcar un precedente cultural. En esta ocasión, esta izada de banderas ha correspondido al Estudio de Baile de Ana Rocío, que a su vez hizo gala de las danzas orientales que cada año cautivan al público en los grandes desfiles de Moros y Cristianos.

Posteriormente Rosa Melchor, en nombre del Ayuntamiento de Alcázar de San Juan, ha hecho entrega de un obsequio, obra del artista local Alfredo Martínez, al pregonero, como recuerdo conmemorativo de su importante aportación en la edición de este año. Un recuerdo que le ahora le hace formar parte de la historia viva de la fiesta de Moros y Cristianos en Alcázar de San Juan.

Tal y como estaba previsto, los asistentes pudieron degustar al final del acto de tés marroquíes ofrecidos por la Asociación de Musulmanes Manchegos.