Autonomía y calidad de vida con la diálisis peritoneal en casa. El Hospital Mancha Centro de Alcázar de San Juan contribuye a la mejora de los pacientes renales

El Hospital General La Mancha Centro se ha sumado al Plan Regional de Promoción de las técnicas domiciliarias en el que la Diálisis Peritoneal es una de las técnicas más importantes ya que aporta una notable independencia al paciente

Sanidad 18 de octubre de 2022

Rebeca García Agudo, Jefa del Servicio de Nefrología; Dolores Escribano Ortiz, Carmen Octavio Pozo, Inmaculada Urbano Ramírez, Enfermeras de Diálisis Peritoneal; y Miguel Ángel Rojas Fernández y Sara Piqueras Sánchez, médicos Responsables de Peritoneal; forman el equipo de la Unidad de Diálisis Peritoneal del Hospital alcazareño. Un equipo humano, cercano y de confianza que aporta tranquilidad y seguridad a los pacientes.

“La diálisis peritoneal se la realiza el paciente en su casa tras un entrenamiento que se realiza en el propio Hospital dando autonomía respecto a horarios, trabajos o viajes”, destaca la Jefa de Servicio de Nefrología del Hospital General La Mancha Centro, Rebeca García.

Esta estrategia permite que el paciente que quiera, y pueda, acogerse a este plan evite los desplazamientos con transporte sanitario en el que se someten a diálisis tres veces a la semana durante cuatro horas en cada ocasión, normalmente en la capital de Ciudad Real. No hay una edad específica para someterse a esta técnica, pero los pacientes ideales son los niños y jóvenes que requieren más independencia a nivel escolar o laboral.

Para poner en marcha este servicio se necesita un recurso fundamental: personal sanitario y de enfermería especializado que es el encargado de enseñar la técnica al paciente así como acometer su seguimiento en un plazo de 2 a 6 semanas. Tardes, noches y fines de semana, un trabajo en el que se eliminan los horarios laborales para garantizar la salud de los pacientes.

La implantación de este servicio supone una gran mejora en la calidad de vida del paciente que ve reducidos sus desplazamientos con los consiguientes beneficios que esto supone, además de recibir la formación a través de un personal cercano y que ya conocen tras años de tratamiento.

“El paciente no se adapta a la diálisis, sino que la diálisis se adapta a su ritmo de vida”, destaca Dolores Escribano, Enfermera de Diálisis Peritoneal.

Una vez se decide decantarse por la diálisis peritoneal en casa y se elige esta opción por parte del paciente, llegado el momento, se programa la colocación quirúrgica de un catéter peritoneal en su abdomen. “A través de una membrana natural como el peritoneo se produce la diálisis que en una clínica de hemodiálisis la realiza una máquina moderna”, indica.

Aunque estos tratamientos sustitutivos a la hemodiálisis en clínica hospitalaria suponen notables beneficios para el paciente, no hay que olvidar que el fin último es el trasplante renal que es “lo que da mejor calidad de vida, es más sostenible a largo plazo y ocasiona menos complicaciones”, subraya la doctora Rebeca García.

El Hospital General La Mancha Centro dispone de una Unidad especializada en enfermedad renal crónica avanzada acreditada por la Sociedad Española de Nefrología desde el año 2021. Hemodiálisis, diálisis peritoneal o trasplante renal, son los tratamientos que se ponen en marcha cuando los riñones dejan de funcionar.

Cuando las contraindicaciones impiden someterse a un trasplante

No todos los pacientes se pueden someter a un trasplante ya que se imponen las contraindicaciones en caso de sufrir una cardiopatía avanzada, una enfermedad pulmonar que no les permite someterse a una intervención quirúrgica o según el nivel de calcificación de su árbol vascular que impediría hacer empalmes cuando se cose la arteria del paciente al riñón que se dona.

En estos casos, el paciente debe someterse a diálisis de por vida. Algo que, como indica la doctora Rebeca García, no supone un problema ya que “se puede estar en diálisis indefinidamente”. La hemodiálisis se trata de una técnica más agresiva ya que durante las tres citas semanales durante cuatro horas que dura cada sesión, “intentamos hacer lo que el riñón hace en 48 horas”. Aquí radica la importancia de que el paciente adquiera hábitos saludables y practique ejercicio físico.

Al tratarse el peritoneo de una membrana natural, la diálisis peritoneal no se puede prolongar durante tanto tiempo estableciéndose un plazo de unos 15-18 años, aunque como señala la Jefa del Servicio de Nefrología, se trata de ofrecer tratamientos sustitutivos y alternativos a los pacientes que contribuyan a mejorar su calidad de vida.

Formación para la diálisis peritoneal en casa

Tras la colocación del catéter en quirófano, la diálisis peritoneal en el domicilio no deja de ser una técnica hospitalaria, por lo que desde la Unidad Peritoneal se aconseja e insiste en la importancia de la higiene a la hora de manipular dicho catéter. Para lograr una limpieza de manos correcta, se utilizan posters intuitivos, además de recomendar el uso de gel hidroalcohólico tras el que se realiza una exhaustiva inspección con una lámpara de luz ultravioleta para observar los resultados.